Fue creada en 2009 por las manos de Teresa Almeida y Celestino Fonseca, quienes se decidieron a explorar más el trabajo artesanal del cacao.
Esta es una relación entre Portugal y Santo Tomé, que crea y transforma el cacao en los mejores dulces, además de dar a conocer al mundo el valor del cacao de Santo Tomé.
La primera tienda abrió en la ciudad de Porto, y ahora también cuenta con una tienda sobre Rua da Prata, en Lisboa. El espacio es de estilo vintage, con muebles de madera oscura y luces que ponen el foco en las verdaderas celebridades: los deliciosos chocolates.
Las cajas de bombones vienen desde 3 piezas, llegando hasta 44.